Niños que lloran al ponerlos a dormir
Carlos González habla sobre los niños que lloran al ponerlos a dormir
Siguiendo con la serie de vídeos de Carlos González que venimos publicando en Bebés y más hoy traemos una nueva entrega en la que el pediatra habla sobre los niños que lloran al ponerlos a dormir.
Como explica, la frase “poner a los niños a dormir” es una actitud moderna que poco tiene que ver con lo que se ha hecho siempre, que no es otra cosa que dormir a los niños.
De un tiempo a esta parte se ha intentado (y se sigue intentando) que los bebés y los niños adquieran una autonomía e independencia casi adulta desoyendo los instintos mamíferos que hacen que los niños requieran la presencia de sus padres (o de su madre) para estar tranquilos, relajados, sentirse bien y dormirse a gusto.
Son muchas, demasiadas, las veces que he leído en libros, panfletos, trípticos, en internet e incluso en guías sanitarias la recomendación “es importante poner al niño a dormir en su cuna cuando aún está despierto”, con la intención de que no asocie brazos con sueño, o teta con sueño, o nada que implique a una persona con sueño, sino que asocie el dormirse con estar solo en la cuna, para que se acostumbre a ello.
Sin embargo, como dijo Pompeu Fabra en su día, “si no lo meces, no se dormirá”. Bien, esto no es matemático. Siempre hay algún bebé que es capaz de dormirse solo si lo pones en la cuna, aunque son una mayoría. Son muchas, muchísimas, las madres que me explican en la consulta de enfermería, como si su hijo tuviera un problema, que lo ponen a dormir y que no hay manera. Explican que lo han intentado de muchas maneras diversas y que no solo no se duerme, sino que llora para que le cojas. Además, añaden “yo creo que se ha malacostumbrado”.
Ante esto, y por culpa de todos esos panfletos, trípticos, libros y profesionales que recomiendan poner a dormir a un niño solo, tengo que hacer un trabajo arduo con estas madres para que se saquen de la cabeza que lo normal es que los niños se duerman solos y que no crean que su hijo tiene algún problema que necesita solución, básicamente, porque necesitan la presencia de alguien que les de confianza para dormir tranquilos.
Si el niño busca a mamá no está malacostumbrado
Si el niño, al ser puesto a dormir, busca a mamá no está malacostumbrado. No es que se haya acostumbrado a hacer algo mal, es que está actuando de un modo innato e instintivo con la intención de asegurar su supervivencia (¿cómo demonios iba a sobrevivir un niño miles de años atrás si cuando su madre le dejaba solo no decía ni mú?). De hecho, no se ha acostumbrado a nada nuevo, porque es algo que hace sin que nadie se lo haya enseñado y sin que él lo haya aprendido.
Poner a dormir a un bebé solo en su cuna sí es acostumbrar a un bebé a hacer algo diferente a lo que trae “de serie”, por eso la mayoría lloran, porque es un acto forzado, porque no es lo que los bebés están preparados a hacer y porque no es lo que esperan que suceda.
Si estando solo en la cuna llora para que lo cojas, no te está tomando el pelo
“Es que lo pongo en la cuna y empieza a gemir y luego a llorar y, si lo cojo, deja de llorar. Yo creo que me está tomando el pelo”. Esta es otra frase que me han dicho cientos de veces y que seguro que os suena a más de una. Sin embargo, si la analizamos, es fácil ver que el niño no está tomando el pelo, sino pidiendo algo y recibiéndolo.
“Tomar el pelo” significa “reírse de alguien” o “engañar a alguien”. Un bebé no es capaz de tomar el pelo. No hace las cosas con segunda intención. S podría decir que un bebé está tomando el pelo si, estando tumbado, empezara a gemir e incluso a llorar y se callara justo en el momento en que su madre lo fuera a coger. También lo estaría haciendo si pidiera por activa y por pasiva tumbarse en la cuna para estar solo en plan “mamá, ponme ahí, de verdad, que me duermo solo” y luego, una vez puesto, empezara a llorar.
Sin embargo esto no sucede así, ni el bebé se calla justo antes de ser cogido ni pide ser puesto en la cuna para hacer pensar que quiere dormir. Él sólo se queja cuando se siente solo para que alguien le acompañe y, cuando lo consigue, se calla. Vamos, que pide, consigue y deja de pedir. Así de simples son.
Fuente: http://m.bebesymas.com/desarrollo/carlos-gonzalez-habla-sobre-los-ninos-que-lloran-al-ponerlos-a-dormir