Permitir que el parto comience de »forma natural” por Lamaze Internacional
Debby Amis, RN, BSN, CD (DONA), LCCE, FACCE
Una mujer embarazada en clase de Lamaze le dice a su instructor y a sus compañeras de clase, “Mi doctor dice que mi bebé está bastante grande. Mi vecina tuvo que tener parto inducido porque se decidió que su bebé era ‘demasiado grande’. ¿Creen que yo deba solicitar inducción del parto?”
En los Estados Unidos, como en muchos países, las mujeres embarazadas escuchan cosas similares durante sus clases de preparación para el parto. La inducción del parto —comenzar el parto de forma artificial— es uno de los temas más controversiales en el cuidado de la maternidad hoy en día. En muchos hospitales, se induce el parto sólo por razones médicas, y los proveedores del cuidado de la maternidad siguen lineamientos estrictos. Sin embargo, en otros hospitales, las mujeres tienen inducciones electivas, aquellas que se hacen por conveniencia más que por razones médicas. Muchas mujeres tienen confusión acerca de cuándo es realmente necesaria la inducción. ¿Hay problemas con la inducción?
¿Cuáles son los beneficios de dejar que el parto comience solo? ¿Cuándo tiene sentido inducir, y cuándo es mejor esperar? ¿Qué es lo más seguro para su bebé?
Es importante saber que un curso de psicoprofiláctico certificado por Lamaze te puede ayudar a trabajar de forma efectiva con tu proveedor de cuidados de maternidad, para que juntos puedan tomar decisiones con las que estés satisfecha y que puedan ayudar a asegurar una experiencia de nacimiento segura, saludable y satisfactoria.
El Plan de Nacimiento de la Naturaleza
Aunque el nacimiento puede ser abrumador, el enfoque natural de Lamaze le quita el misterio al proceso. Su cuerpo está perfectamente diseñado para parir a su bebé. Durante las últimas semanas del embarazo, tu cuerpo y tu bebé se preparan para el nacimiento. En una madre primeriza, el bebé a menudo “baja” a la pelvis semanas antes de nacer. El cuello del útero se inclina hacia adelante y gradualmente comienza a suavizarse. A lo largo de un periodo que puede durar unos días o unas semanas, puede (o no) sentir contracciones irregulares que le ayudan al cuello del útero adelgazarse en forma gradual, y tal vez, incluso dilatarse unos centímetros.
Durante la última etapa de su embarazo, los pulmones de su bebé maduran, y adquiere una capa de grasa protectora, lo que le da la gordura característica del recién nacido. Desarrollos críticos en el cerebro continúan durante las 41 semanas de gestación. Los científicos calculan que la materia blanca del cerebro fetal se multiplica cinco veces entre las semanas 35 y 41 de la gestación.
Los investigadores continúan investigando sobre cómo continúa creciendo el cerebro del bebé después del nacimiento, comparado con cómo crece cuando sigue en el útero materno (Kinney, 2006)
Cuando los órganos del bebé están maduros y está listo para la vida fuera del útero de su madre, los científicos creen que el cuerpo del bebé libera una pequeña cantidad de una sustancia que señala a las hormonas de la madre que comiencen el parto (Condon, Pancharatnam, Faust & Mendelson, 2004).
La ola de hormonas maternas que acompaña la gestación llevada a término y el nacimiento espontáneo vaginal parecen ayudar al bebé a prepararse para la transición de la vida en el útero a la vida afuera y, en especial, para respirar con los pulmones por primera vez (Jain & Eaton, 2006). Incluso si sabes de antemano que tu bebé tendrá que nacer mediante cesárea, la mejor forma de saber que el bebé está lo suficientemente saludable para nacer es dejar que el parto comience solo.